El Siglo de Torreón
La medicina tradicional se viene
utilizando desde hace miles de años y abarca una amplia variedad de terapias y
prácticas que varían entre países y entre regiones. En algunos países se
denomina medicina «alternativa» o «complementaria». La medicina tradicional y
sus practicantes han contribuido enormemente a la salud humana, en particular
como proveedores de atención primaria de salud al nivel de la comunidad
indígena y rural.
La práctica de algunos sistemas de medicina tradicional
se remontan a miles de años atrás y particularmente a partir del decenio de
1990 se ha constatado un resurgimiento de su utilización en muchos países
desarrollados y en desarrollo, en parte porque son naturales con lo que se
denomina “naturismo” y en parte porque la medicina occidental moderna no ha
podido aliviar múltiples enfermedades infecciosas y crónicas degenerativas.
Algunos expertos de prestigiadas revistas médicas interpretan esa tendencia
como una mordaz crítica de la medicina especializada basada en la alta
tecnología, pese a sus bien documentados méritos. En Europa este resurgimiento
hacia el naturismo es tan marcado, que poco más de la mitad de la población
busca a los médicos naturistas.
La
herbolaria es una de las formas de medicina tradicional aprobada por la
Organización Mundial de la Salud. La medicina herbolaria utiliza hierbas o
derivados vegetales, preparaciones y productos herbarios, cuyos ingredientes
activos son parte de las plantas.
Las plantas se han utilizado para aliviar las
enfermedades por miles de años, tan es así que en la Biblia se mencionan más de
150 especies vegetales con alguna utilidad curativa. Las plantas medicinales
son un importante elemento de los curanderos indígenas.
Durante sus 3000 años de historia, la medicina
tradicional china ha sido pionera en el fomento de intervenciones relacionadas
con la dieta, el ejercicio, la concientización sobre las influencias
ambientales en la salud y la utilización de remedios herbarios como parte de un
enfoque holístico de la salud. La idea de que la prevención es mejor que la
curación es una aportación que la salud pública debe a China y al Huangdi
Neijing, el libro más importante de la antigua medicina china.
La Organización Mundial de la Salud en su Declaración de
Beijín invita a todos sus países miembros a considerar la posibilidad de
incluir la medicina tradicional en sus sistemas de salud sobre la base de datos
probatorios sobre seguridad, eficacia y calidad. Al mismo tiempo, recomienda
seguir desarrollando la medicina tradicional sobre la base de la investigación,
innovación y propiedad intelectual. En particular, México conserva una riqueza
en el conocimiento de la herbolaria desde antes de la conquista por los
españoles. La UNAM y otras universidades del país han retomado la investigación
farmacológica de las plantas medicinales en búsqueda de nuevas sustancias
químicas que puedan curar viejas y nuevas enfermedades. En ese sentido, la
Facultad de Medicina de Torreón, se ha sumado al esfuerzo por incrementar el
conocimiento etnomédico de la, flora medicinal del Norte de México.
*Doctor en
ciencias. Profesor de Bioquímica e Investigador del Departamento de Bioquímica
y Farmacología de la Facultad de Medicina de UA de C.
La próxima colaboración será del Dr. Daniel Arellano
Pérez Vertti, traumatólogo.