sábado, 24 de diciembre de 2011

OBESIDAD INFANTIL

DR. DOMINGO GARCÍA ALCÁNTAR*
El Siglo de Torreón aquí
El objetivo del presente texto es compartir información sobre la obesidad, dar a conocer la magnitud, impacto y trascendencia de ésta y sensibilizar al lector sobre la necesidad de cambiar estilos de vida
            La obesidad  Infantil se define como un trastorno metabólico caracterizado por exceso de grasa corporal. Es un problema de salud pública con repercusiones graves en los niños, es considerada por la O.M.S. como  la epidemia del siglo XXI. Corresponde a la segunda causa de muerte prevenible después del tabaquismo, esto se debe a que el 95 por ciento de las personas consume calorías  en exceso, lo que se conoce como obesidad  exógena.
            Algunos de los factores que influyen para desarrollar la enfermedad son el aumento en el sedentarismo y la propaganda que induce al consumo y que presenta ofertas frecuentes de productos hipercalóricos. Además, la sociedad se está alejando de los métodos de preparación tradicional de alimentos, que es más sana y está consumiendo  productos  procesados industrialmente. Por ejemplo, en México el promedio de consumo de refrescos por mexicano es de 149 Litros al año y 107 de ellos son de cola.
            Según el Inegi, hasta el año 2010 hay 43 millones 490 mil personas menores de 19 años, y de acuerdo a la encuesta nacional de salud y nutrición  la prevalencia de la obesidad en los últimos siete años ocurre en todos los grupos de edad, siendo a nivel nacional de alrededor de 35 por ciento para ambos sexos y de ellos los escolares son los más afectados; el norte tiene 45 por ciento y Coahuila el primer lugar. Esto es sumamente preocupante por todo lo implicado. La obesidad y  el sobrepeso incrementan el riesgo de enfermedades metabólicas como la diabetes, la hipertensión arterial, infartos al miocardio; trastornos circulatorios, renales, cerebrales, cáncer, problemas ortopédicos, artritis, baja  autoestima y depresión. En general las personas obesas tienen un riesgo de 50 a 100 por ciento mayor de morir tempranamente.
            El impacto económico también es preocupante: la O.M.S. en términos relativos afirma que la obesidad aumenta los costos de atención de salud en un 36 por ciento y los de medicamentos un 77.
            ¿Qué podemos hacer? Alimentar al bebé al seno materno por lo menos  los primeros 6 meses o un año, incluir en su dieta frutas y verduras, incrementar la actividad física caminar por lo menos 30 minutos diarios, compartir estos hábitos con la familia y amigos, cambiar estilos de vida. Hacer un equipo multidisciplinario con la familia, el pediatra, el nutriólogo, los maestros, el psicólogo y el gobierno, de tal manera que todos contribuyamos en la solución desde  los diferentes roles que jugamos en la vida.
            *Pediatra. Subdirector de Enseñanza e Investigación del Hospital Infantil Universitario. U. A. de C.
                     La próxima colaboración será del Dr. Adalberto Mena Caldera, psiquiatra.